Simone

A titulo póstumo quedó dicho
que no habría final sin un principio.
El principio quedó encallado.
Absorto y estupefacto.
Al verse a la cola del final.
Pues él principio se creía causa de toda cosa.
No consecuencia. Tampoco resultado.
Se escondió entonces entre lineas, de los paréntesis y las comillas,
de una historia sin principio ni final.
A medio hacer. Inacabada.
Sin terminar.
Llorando su sinsentido y sin saber su objetivo.
Ni Cual era El cometido que todo principio tiene cuando algo llega a su final.
Y empezó a no quererse...
Y empezó a no saberse querido. 
A preguntarse la razón de su destino. 
Cuál era el renglón, cuál,
de la página en blanco, su camino.

Se olvidó del título de su nacimiento,
 o mejor dicho la póstuma frase a recordar en su entierro.
Que la misma era.
Pues no hay final sin comienzo
aunque el comienzo sea protagonista al terminar,
 y el final dé el pie al comenzar. 

Algo se le escapaba al entendimiento de nuestro principio,
que lloraba sin cesar por no saberse querido.
Querido por si mismo. 
Y el acento del misterio lo tenía la propia negación.
Disimulada Entre medias de toda historia.
Una negación muy pequeña, muy corta, pero que daba o quitaba el sentido de la historia.
De la frase.
Del título.
Que al principio parecía otra cosa. 
En ese momento exacto,
aquel sinsentido empezó a tener sentido. Todo comenzó cuando se le extrajo la negación al sentido del principio. 
Y se le dio la importancia merecida aún siendo negación.
Aún pareciendo una desdicha. 
Pues recordemos que:
No habría final sin un principio,
 y esa condición hacia imprescindible a todo principio que apostase por un final.
Fuera éste como fuera. 
(Tito tarántula. After dark)

Entonces el final quedo absorto. Bloqueado. Estupefacto. 
¿Acaso Él no importaba nada? 
En su memoria la misma frase como retahíla obsesiva de una caída. Fuese éste como fuera. Fuese éste como fuera. 
El principio siempre será lo que da vida a la historia. 
El final dolido cayó en su propio olvido. 
Tal vez por colocarse tan al principio, 
Mas allá incluso del propio principio. Cuando el renglón esta en blanco
 y el camino aún, por delinear su trazo. 
Y si no hay final, ya sea porque cayó olvidado en vete tú a saber que renglón del pasado.
Ya sea porque lo olvidado dicen que no existe.
Y sino existe, no está.
(Kings of Leon. Pyro)

La historia se enrollo en su propia circular y más que una historia empezó a parecerse a un dibujo contemporáneo Qué,
o mareaba o aburría o
demasiado embrollaba a la sabiduría. 
El caso es que el principio que ya no era tal. volvió a perder el hilo y a no encontrar el sentido de tanto y tanto desatino. 
Pero este final por fin recordó a su antecesor. El importante No. Un no sin condición. Y decidió no ser jamas olvidado y decidió que él, no Sería como fuese. Nunca cualquier cosa.
Nunca rechazado... Rechazado por si mismo. 
Y empezó a quererse. 
Dando así sentido al principio,
que recordemos,
no se quería por verse al final. 
Y así viéndose el principio y el final una misma cosa.
Y así, Queriéndose por igual. Empezó la historia a tener sentido, llegando al final.
(Vetusta Morla. Puntos suspensivos)

Lo intuyes pero no eres capaz de verlo.
Si al camino no se le encuentra un sentido,
un objetivo que lo haga vibrar en positivo.
Se vuelve camino circular.
Circulo vicioso. Destino perdido.
Lo sabes verdad?.
Así es sabido por todas. Por todos.
A nivel individual.
Porque crees entonces que no es así a nivel global?.

Un mismo objetivo universal.
Mundial.
Terrenal,
que nos una por igual.
Objetivo nuevo que no nos separe por viejas creencias.
Y vibremos con la misma fuerza.
En la misma sintonia... Y con distintos brillos.

Dibujemos metas que aclaren el camino,
 para no perdernos en este sinsentido de luchas por distintos objetivos.
Porque no es más que eso..
Y Ya lo intentaron otros antes que tú y antes que yo.
A través del invento del gran pastor convertido en gobierno.
Y Llevaron a la humanidad en conjunto al mismo lugar.
Mismo pensamiento.
Pero no funcionó. No convenció.
 Pues en cada palabra e idea.
Sobre la verdad verdadera del sentido de esta senda global.
Estaba inmerso el dolor.
El desprecio, la humillación y aniquilación de parte de la población.
La humana y la animal,
Y repito .
No funciona.
Acaso no lo ves?.


(Kase O. Esto no para) 

Porque La tierra sola vibra en Do menor.
Porque damos estacadas al viento.
Ciegos de ignorancia.
O de dolor.
O de obsesión.
Siguiendo el camino sin observar alrededor.
Perdidos.
Sin saber que estamos perdidos.
Acéptalo.
No sirve ésta ecuación.
Deja de intentar resolver el problema con la misma piedra hecha teorema.

Olvidemos el significado filosófico que separa según el sentir de cada
 y recordemos cómo,
al igual que a nivel individual dejamos de tratar temas espinosos con seres queridos para no lastimar ni sentirnos heridos.
Para no pelear.
 De igual manera busquemos entonces un nuevo sentido que nos haga sentirnos unidos.

Tal vez un nuevo porqué.
O una nueva meta que, por ejemplo nos divierta.
Quien sabe si tal vez nos hemos tomado demasiado en serio este cuento.
Quien sabe quien tiene la razón.
¿Porqué se tuvo que poner en la palestra ideas y formas de pensar que nos empuja a separarnos de los demás y a unir lo que somos con el porqué estamos aquí.
Si lo uno no quita lo otro.
Pues lo que a unxs gusta  a otros repele.
Y no importa lo que es bien y es mal.
Y no importa la causa.
Falló el intentar convencer a la oposición.
La vibración en des-coordinación.
La melodía desafinada..
El humano perdido.
Desorientado.
La guerra en la palestra.
Se te había olvidado verdad?.
Tan inmerso que estás viendo lo que nos hace distintos.
Que ya no recordamos que somos lo mismo.
Tan inmersos en el problema de la convivencia.
En ver quien agarra el timón de este barco.
Que se nos olvidó el porqué existe dicho timón.
Y aun más cual es la dirección.
Y Así es imposible llegar a tierra o disfrutar del viaje.
En ésta barcaza está inmersa la raza humana.
Y todas las de más especies que no.. No solamente acompañan.
Y nos hundimos ahora si que si y de verdad de la buena.

Busquemos pues el objetivo. Y soñemos de verdad
 Busquemos pues la meta que al colectivo humano toque en la tecla.
Que al planeta le haga vibrar con toda su fuerza.
Que nos haga remar en el mismo sentido.
Pero que nunca nos intente hacer pensar lo mismo.
Distintos caminos a la medida de cada ser.
Con muchas metas para un mismo objetivo con el que estar de acuerdo el colectivo.
Y como una obra de grandes dimensiones.
Que cada cual haga su papel.
Que Cada persona  aporte según su don y su saber. Es la clave.
Nuestras diferencias se complementan para la construcción de esta hermosa cancion. Pero no lo sabemos ver
O mejor ditxo aún no hemos caído en cual es la construcción a realizar o lo que coño sea aquello que debemos hacer para no fracasar como especie.
Aquello que pueda aprovechar las diferencias para construir algo que nos haga ver que merecemos la pena como ser humano.
Porque lo sé. No me puedes engañar. Piensas que la especie humana es fracaso. Con el autoengaño de que el fracaso es el otro, el que piensa distinto a tú.
 Aun no hemos encontrado que poder hacer en común con tanto saber distinto.
Perdidos y desorientados. La mirada fija en el árbol. Metidos hasta el cuello en el barro.
Y esta tierra es un barco sin timón que al arrecife se acerca de forma imparable y violenta.
Y Es para todas y todos el mismo. Nadie saldrá de aquí vivo.
Que pena y que fracaso no haberlo sabido.
Hagamos un cuadro entonces. De millones de colores.
Una canción con todas la melodías posibles. Que ninguna es fea si se acompasa con la que lo complementa, volviendola perfecta.
(Barcos de Papel. Feat. Khane)

Y creemos un poema de millones de palabras diversas.
Realizemos la estructura echa de toda la materia.
La nueva y la reciclada.
Bailemos cada cual con su movimiento.
La melodia universal.
Juguemos mientras estemos vivos a descubrir cual será el final del camino si lo hubiera. Cual la meta. Cual nuestro sentido.
Podemos todos a una luchar por un barco eterno y bonito. Pero sin dirección.
Podemos Todos a una luchar por convivir bien juntos mientras se estrella.
Pero seguiremos perdidos.
Porque aún hay algo que se nos escapa.
Aún la clave.
Que por puro desinterés no estudiamos cual es.
O por puro olvido.

 ahora descubre la verdad de la metáfora.
Haz real cada palabra de éste sinsentido.
y vuélvete alma eterna conmigo.
(manu Chao. Me gustas tú) 

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