La erótica sin cuento

Quiero leerte el cuento
más bonito de la historia.
Un cuento que es real.
No empezaré con un dicen,
porque es un secreto.
No empezaré con un hace tiempo,
pues es atemporal.
Este cuento no habla de aventuras,
pues es en sí mismo,
una aventura.
Es una experiencia,
que si sabes escuchar,
tu mismo podrás vivenciar.
No es un cuento con final,
una vez empezado,
nunca podrás cerrar sus páginas,
y olvidar.
Pues este cuento se relata
en el día a día.
Sus palabras se manifiestan,
si las sabes escuchar.
Quiero leerte un cuento,
que despierte tu percepción
Leerte un cuento que,
no he inventado yo.
Pero que te ayudará a quererte,
y conocerte.
Quiero leerte un cuento
sobre los sonidos de la tierra,
Y como te muestran la verdad,
Sin importar si estas en el campo,
o por el contrario
Estas en la ciudad.
Porque cada palabra escuchada
a tiempo seré yo,
contándote éste cuento.
Y no importa que no sea mi voz.
No importa si viene de dentro,
o por el contrario,
del exterior.
Cada mensaje de amor, cada Consejo, cada risa traída por el viento, provendrá de mi corazón.
Este cuento no se vende,
no se cuenta, es un secreto.
La única moneda de cambio,
es el amor.
Ahora abre si quieres este libro,
y sal a escuchar.
            

( Leonard Cohen. Dance me to the end of love)

Entonces, siente ese viento que mueve los árboles
Sientes su fría calidez acariciando tu rostro.?
Porque es mi pensamiento que te extraña.
Cuando el contacto es imposible,
Cuando la distancia de dos mundos nos separa.
Ese viento soy yo , y tu....
Las ramas del árbol
Que ves tras tu ventana,
Que se balancea como
un cuerpo desnudo
Con cada suave penduleo
De mi cuerpo cuando te ama.
Cuando el viento despeine tu cabello,
Recuerda mis ojos que te miran,
Cuando miro a la nada
Y siente su caricia que se estira
Muerta de sueño,
En una noche desvelada.
Cuando el viento empuja ramas secas en la calzada,
Trae cantares antiguos,
Llenos de misterio y magia.
Entonces el cielo brilla,
Y los milanos planean
Incitando a convertirme
En un duende que,
Con el corazón baila.
Cuando el viento moje tus ojos
De lágrimas saladas,
Disfruta en silencio
Y observa a aquella estrella solitaria.
Que perdió el norte,
Para encontrarlo en tierras lejanas.

       ( moby. Dream about me)

Y es la distancia.
Y Es el silencio quien
me hace recordar Tu voz.
Que suave penetra en mi cabeza,
como si de una melodía se tratara.
Entonces cierro los ojos y te escucho, sin entender ninguna palabra.
Pues éstas dejan de tener significado,
para convertirse en
melodías que besan mi alma.
Y Como una nana antes de dormir, el tono de tu voz se  torna calma.

Sueña, melancolía entonces, que adormeces mi alma.
 Que mi corazón se ablanda
Y se ablanda el aura.
 Ya que tu voz dulce de leche
Ternura al alba,
 le sueña a mi mente
A mi mente que te extraña

(Manolo García. En Tu Voz)

Porque tu sabes cuando duermes.
Y sólo mientras duermes....
Y sueñas con pasados no escritos

y futuros de quimera.
Que En el fondo de una duna,
existe un pensamiento enterrado,
dentro de una semilla,
con piel de árbol.
Que Apenas existe,
este pensamiento que se expande,
pero dentro de él
guardada una palabra,
que en el corazón arde.
Y sabes que No tiene nombre,
pero que su nombre es hermoso.
Y que La cáscara
de su semilla se quiebra, porque el pensamiento,
lentamente se eleva,
con su raíz en el fondo de la duna,
del útero de la luna.
Porque El tallo,
vestido de blanco,
sube cada vez más alto,
puro y sincero,
altivo y sin miedo,
creando energía,
desde el suelo hasta el cielo.
Sabes cuando duermes,
Que La garganta
queda preñada,
del sonido de esta palabra,
que cae como cascada
por mi boca,
cantarina y jubilosa,
cuando miro tus ojos,
que suavemente me tocan.
Entonces el pensamiento
es liberado,
sin hacer nido en ningún árbol,
por lo que el sonido de la palabra
se vierte con frescura y deleite,
en tu boca, para quererte.

         (Massive attack. Ángel )

Y  solo si encuentras mi voz
Al escuchar a otra gente.
Al escuchar al río o al viento.
Si encuentras a mi corazón que te ama
A través de melodías inventadas.
Es únicamente porque
El otro día soñé
que me amabas,
Ke tus dones,
convertidos en savia y corteza,
En danzas e irrintxis,
Me regalabas.
Sueña entonces que saboreas el alma de mi húmeda tierra, 

Hecha de barro y helechos, de hayas y robles, 

De pastos de fresca hierba y agua.
Suéñame entonces,
orgullosa y guerrera,
Pero también cansada.
Suéñame traviesa y alegre, 

Pero también con una pena en el alma,

En el alma enraizada.
Y lava por siempre mi herida, 

Cúrala con besos llenos de esperanza.
Porque mi alma quedó marchitada, 

De normalizar la tristeza, 

el eterno trauma.
Desentierra entonces la raíz de la herida 

De ese árbol milenario que comprende mi vida. 

y verás, 

que queda enterrada en el manto de mis sueños, 

Llenos de dioses, duendes y hadas, 

Esa cicatrizada herida

En la que la tierra al fin, 

Despierta y sana.

                

   (Mikel laboa. Piedra y camino)

Y entonces:
No dejes de observarme
con esos ojos grandes y serios.
No dejes de hacerlo así,
En silencio, cuando crees
que no miro.
Mirada indescifrable la tuya
Que se clava en el estómago
Como una raíz en un bancal
Creciendo desenraizada.
No dejes de hacerlo
Que es como una caricia
En la distancia.
Porque al descubrirte noto
El calor de tu pasión
Que no se aparta.
Y mi imaginación vuela
Preguntándose que sentiría
Mi cuerpo entonces,
Si tus dedos al igual
que tus ojos
recorrieran mi pequeña
boca sellada.
Porque En la oscuridad
de la noche te cuento
Entre susurros llenos de silencio.
Que ya No te miro. No hace falta.
Para que?. 

¿Para que los ojos me lloren?, 

¿y se me encoja el pecho?. 

¿Y me Arda?. 

En llamaradas de oscuros pensamientos.
Prefiero no mirar. 

Para ver tu espalda recta y recia. 

O tu cara de mirada preocupada, mirando a la nada...

tal vez a mi imagen inventada y desvirtualizada 

Sobre aquello que no soy yo.
Pero escucho tu voz impulsiva como un alud en pleno deshielo..

o como un torrente con su cascada...
Y me arde de nuevo el pecho y el alma. 

Y se me enferma de pasión descuidada. 

Por no ser mimada. 

Por no cuidármela tu con tus labios pequeños 

y tus manos llenas de una seguridad que a mi se me escapa.
Mejor me voy y me encierro en el cobijo que me permite.

Que me permite si,

que se me escapen en gritos los suspiros de esta pasión infravalorada. 

De este amor insatisfecho que no me deja sentir apenas nada

( Mobi. One of these morning)

Y es que tu Eres. .eres..
Eres un racimo recién cortado,
Un paseo entre valles.
Una canción bien elegida.
Una foto a escondidas,
Eres una risa espontanea
En medio de la noche.
Eres la palabra encendida,
La alegría presente,
El entusiasmo incipiente.
Eres una puerta abierta
en medio de la montaña.
Una puerta ke no se cierra
Aunque se quiera cerrar.
Eres un dulce beso
Un abrazo sincero
Una caricia ke no va mas allá.
Eres poco a poco
Y sin estar eres más.
Una noche estrellada
Un paseo en bici
En medio de una ciudad.
El estomago hecho un nudo
Las ganas de llorar
Eres el cigarro encendido
La sonrisa de mala
A punto de actuar
El guerrero de mis sueños
de libertad.
Eres mi mentira y mi verdad
La sana duda de mi realidad.
Eres y no eres
Pero quien sabe…
Si alguna vez serás.

     (Silvio Rodriguez. Te doy una Canción)

Entonces recuerda que
aunque no esté,
Aunque no se me vea
Ni se me oiga.
Estoy dentro de ti.
Soy aquello que no se ve
Aquello que hace que la piel
Se erice por dentro.
Soy aquello que al entrar en ti
Te llena de algo Que grita
En tu pecho.
Soy las ganas y el deseo.
De no sabes muy bien que.
Pero lo conoces desde hace tiempo.
Cuando sonríes o te estiras
De modo placentero.
Con la mente en blanco.
Degustando tu momento
Disfrutando el silencio.
Y sin saberlo
Me aceptas porque soy tu
Desde el otro lado de mi cielo.
Y eres yo desde éste espacio
Atemporal de tu sueño.
             

(Thindersticks. Carla Torgerson. Travelling light)

Por eso si algo cambia
que sea a mejor.
si algo duele
que se escupa al viento.
si algo termina,
que me lleve dentro,
los buenos momentos.
si te fallo,
que el cielo se abra en dos y,
del hueco salga mi perdón
en forma de besos.
si me fallas, no digas lo siento, 

mírame a dentro 

y al corazón susúrrale 

una verdad en forma de cuento

      (Vetusta Morla. Al respirar )